29 de mayo de 2025
La comuna de Cabo de Hornos, ese punto extremo de la Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, vive una transformación marcada por el dinamismo de sus rutas de acceso, la creciente afluencia turística y un enfoque cada vez más definido en la conservación y uso responsable de sus vastas e idílicas áreas protegidas. Con cifras concretas, decisiones municipales concretas y una operación constante de rutas marítimas y aéreas, este territorio privilegiado se posiciona como un epicentro estratégico de conectividad, turismo sustentable y actividades científicas.
Una de las notas más relevantes para la zona fue la reactivación del cruce marítimo entre Ushuaia (Argentina) y Puerto Williams (Chile), habilitado nuevamente a partir del 25 de octubre de 2024, luego de más de cuatro años de suspensión. Desde entonces, el servicio se ha mantenido activo, permitiendo un flujo regular de pasajeros entre ambas localidades y proyectándose su operación continua durante todo el 2025, siempre que las condiciones climáticas lo permitan. Este enlace ha significado no solo una mejora en la conectividad binacional, sino también un impulso al turismo y la economía local.
El acceso a la isla Navarino, el punto terrestre poblado más austral del globo, se complementa con un flujo aéreo igualmente significativo. Entre el 1 de octubre de 2024 y el 31 de marzo de 2025, se registraron 13.254 pasajeros en vuelos desde Punta Arenas a Puerto Williams y 13.428 en la dirección inversa. Estas cifras, que incluyen vuelos regulares, chárter y privados, reflejan la creciente demanda de conexión con el territorio insular, ya sea por motivos turísticos, logísticos o de investigación.
El turismo de naturaleza es uno de los principales motores de desarrollo en la zona, y un ejemplo emblemático es el trekking Dientes de Navarino, considerado uno de los más australes y desafiantes del mundo. Según registros oficiales, en la temporada 2024-2025 un total de 1.217 turistas recorrieron este circuito, superando los números de años anteriores (829 en 2021-2022, 955 en 2022-2023 y 1.172 en 2023-2024).
Los meses con mayor afluencia fueron enero (382 personas) y febrero (342), seguidos de diciembre (217) y marzo (194). Un dato destacado es la participación de visitantes de 37 países, encabezados por Chile (549), Alemania (124), Francia (102), Estados Unidos (79) e Israel (37), lo que confirma el creciente atractivo internacional de este destino. Sin embargo, la actividad no está exenta de desafíos: durante la última temporada se reportaron tres rescates por incidentes durante el recorrido y 23 personas realizaron el circuito fuera de temporada oficial.
En respuesta a las condiciones climáticas adversas y con el objetivo de resguardar la seguridad de los visitantes, el municipio de Cabo de Hornos emitió un decreto alcaldicio que ordena el cierre temporal del circuito de trekking Dientes de Navarino desde el 4 de abril hasta el 31 de octubre de 2025. La medida afecta el tramo entre el Hito 4 (Cumbre del Cerro La Bandera) y el Hito 38 (final del circuito), y ha sido notificada a todas las instituciones pertinentes, empresas turísticas y servicios públicos. Esta decisión se justifica en la dificultad del terreno, la escasa visibilidad de la señalética en invierno y los riesgos asociados al tránsito en condiciones de nieve extremas.
La riqueza natural de la comuna no se limita al circuito de trekking. Varios parques nacionales forman parte del ecosistema protegido Parque Etnobotánico Omora, Parque Nacional Cabo de Hornos, Parque Nacional Alberto de Agostini y Parque Nacional Yendegaia, entre otros. Este último merece atención especial, ya que se encuentra actualmente cerrado al público general. Sin embargo, entre 2024 y 2025 se autorizaron ingresos selectivos —principalmente para actividades científicas y pedagógicas— bajo estrictos controles y previa autorización de CONAF. Aun así, se ha reportado un incremento de accesos no autorizados, especialmente desde sectores como Pampa Guanaco, muchas veces promovidos por operadores turísticos informales. En total, durante el 2024 se registraron 39 ingresos (24 autorizados y 15 no autorizados), mientras que en 2025 los accesos no autorizados subieron a 84 solo en los tres primeros meses del año, una señal de alerta para las autoridades.
El Parque Yendegaia también se ha convertido en un espacio relevante para el desarrollo de investigaciones científicas, gracias a un programa colaborativo entre CONAF y la Universidad de Magallanes (UMAG) sede Puerto Williams. En él participan docentes y estudiantes que, con el equipo adecuado y respetando las medidas de seguridad, realizan trabajos de campo orientados al conocimiento y preservación de uno de los ecosistemas más prístinos del planeta.
La actual situación de la comuna refleja una combinación de progreso, planificación e implementación de políticas locales orientadas a proteger un territorio de altísimo valor ecológico y cultural, sin descuidar su rol estratégico como vínculo entre Chile y Argentina en la región austral. Las autoridades locales, encabezadas por el alcalde Patricio Fernández Alarcón, han adoptado medidas activas y coordinadas para facilitar el acceso, fomentar el turismo responsable y garantizar la seguridad de residentes y visitantes, confirmando que Cabo de Hornos no solo es un destino remoto, sino también un modelo de gestión territorial en contextos extremos.
En un mundo cada vez más afectado por el cambio climático y el turismo de masas, la comuna de Cabo de Hornos parece haber encontrado un delicado equilibrio entre apertura y preservación, entre desarrollo y respeto por la naturaleza. Un lugar que, más allá de su geografía aislada, se posiciona en el centro del debate sobre cómo habitar y cuidar los últimos rincones del planeta.
Con ello, se impulsará la iniciativa Frontera, que la empresa planea ejecutar en Tierra del Fuego, en la región de Magallanes.
Con ello, se impulsará la iniciativa Frontera, que la empresa planea ejecutar en Tierra del Fuego, en la región de Magallanes.